La postura, comentarios y actitudes a menudo influyen en la opinión del entrevistador. Lo que haga o deje de hacer en una entrevista, puede ayudarle (o no) a conseguir el trabajo.
La siguiente lista de consejos le ofrece pautas de sentido común para que tome en cuenta.
Qué hacer:
1. Obtenga información con anticipación acerca de la compañía.
2. Practique responder a preguntas difíciles (esas cosas que considera debilidad en su curriculum)
3. Duerma bien la noche anterior, de modo que pueda estar mentalmente alerta.
4. Vístase en forma adecuada y cuide su aspecto. Llegue 15 minutos antes, para que tenga tiempo de relajarse.
5. Lleve el currículum impreso, hojas adicionales y un lapicero para anotar datos de interés.
6. Trate a todos los que se encuentre (vigilante, recepcionista, jardinero) con amabilidad. Pueden ser aliados mas adelante.
7. Transmita entusiasmo. Sonría y estreche la mano con firmeza. Hable con claridad, y pronuncie correctamente.
8. Siéntese derecho, haga buen contacto visual. Muestre un interés amable y sincero por lo que le comentan.
9. Responda en forma completa a las preguntas del entrevistador. No cambie de tema.
10. Escuche al entrevistador. Esto evitará que vuelva a preguntar por temas que ya hayan sido tratados.
Qué NO hacer:
1. Llevar parientes, amigos o hijos.
2. Hacer preguntas que sólo se refieran a la remuneración y a los beneficios.
3. Demostrar desesperación.
4. Interrumpir. Si tiene preguntas o si necesita aclaraciones, espere a que se produzca una pausa.
5. Evite hablar de asuntos personales y/o polémicos (problemas económicos, política, religión, fútbol, otros).
6. Hablar mal de compañías, empleadores o compañeros de trabajos pasados.
7. Utilizar excusas insustanciales, tales como: “Era demasiado trabajo” o “La gente con la que trabajaba era desagradable”.
8. Perder de vista el efecto que usted causa en el entrevistador.
9. Mascar chicle, tocarse el cabello constantemente o contestar el teléfono (esto distrae la atención)
10. Tomar notas durante la entrevista sin pedir permiso.